Bajo el mandato de Ramón Lanús, se están llevando a cabo una serie de operativos que buscan combatir la compra-venta ilegal. Además, están trabajando para evitar la ocupación del espacio público no regulado y el despliegue de la venta ambulante.
En el barrio de Boulogne, localidad de San Isidro, se realizaron una serie de operativos de inspección que terminaron con seis locales clausurados a causa de no estar autorizados por la Municipalidad.
El objetivo de la gestión de Ramón Lanús, intendente de San Isidro, es combatir la venta ilegal y cuidar el medio ambiente, previniendo la propagación de enfermedades, ya que estas actividades propician la falta de higiene y la aparición de plagas, vectores y dengue, entre otras problemáticas.
En total, fueron nueve los espacios en donde se detectaron irregularidades: como acopio de metales, actividad de chatarrería, ocupación de vía pública sin autorización, compra-venta de chatarra; y en todos los casos se procedió a la clausura del lugar. Seis de ellos pertenecen a la localidad de Boulogne.
Además, la Subsecretaría de Fiscalización y Control y la patrulla municipal realizan operativos para evitar la ocupación del espacio público y el desarrollo de la venta ambulante. También se efectúan controles de Bromatología en las cadenas de supermercados chinos con el fin de verificar el vencimiento de la mercadería.




