El crimen perpetrado por Eduardo Vázquez, baterista de Callejeros, marcó uno de los casos más dolorosos en la historia reciente de Argentina. A 15 años de la tragedia, la familia sigue exigiendo justicia.
Wanda y Eduardo fueron pareja cuando eran jóvenes, pero se separaron y cada uno continuó con su vida. Ella se casó y tuvo dos hijos, pero en 2007 retomaron el contacto y, en noviembre de 2009, decidieron casarse.
Tres meses después de su boda, el horror se desató. Wanda fue asesinada de forma brutal y Eduardo Vázquez fue llevado nuevamente a juicio por su crimen.
El 21 de febrero de 2010, Wanda Taddei fue rociada con alcohol y prendida fuego por su esposo Eduardo Vázquez en su casa de Mataderos, tras una discusión. A pesar de su grave estado, Wanda falleció días después debido a las quemaduras. El femicida, conocido por su vinculación con la tragedia de Cromañón, fue arrestado.
El primer fallo fue de 18 años de prisión por homicidio calificado, pero tras un proceso de apelaciones, la condena fue modificada a perpetua. Vázquez cumple su sentencia en el Complejo Penitenciario de Ezeiza. La lucha por justicia, aunque demorada, finalmente ha logrado que el caso sea reconocido como un femicidio y que la verdad salga a la luz.




