Un informe revela que más de la mitad de los estudiantes argentinos se distraen con sus dispositivos en las clases, lo que afecta sus rendimientos en las materias, en comparación con otros países.

Un estudio muestra que los estudiantes argentinos están entre los más distraídos por el uso de celulares en las aulas. En el informe, que analiza los resultados de las pruebas PISA, Argentina ocupa el primer lugar en distracción digital, con un 54% de los estudiantes reconociendo que el celular les quita la atención durante las clases, especialmente en matemáticas.

El uso de dispositivos móviles en el aula ha crecido globalmente, y en Argentina, más de la mitad de los alumnos utilizan sus celulares a diario. Esta tendencia coincide con una disminución en los puntajes de los estudiantes en matemáticas, donde Argentina se encuentra por debajo de países con restricciones más estrictas sobre el uso de tecnología en las escuelas.

El informe destaca también que las tasas de distracción son menores en países como Japón y Corea del Sur, donde el uso de celulares en clase está fuertemente regulado. Estos países también muestran mejores resultados académicos, lo que sugiere que la restricción tecnológica podría ser un factor clave para mejorar el rendimiento estudiantil.

El debate sobre la regulación del uso de celulares en las aulas continúa. En algunas regiones de Argentina, como en la Ciudad de Buenos Aires, se han implementado restricciones, prohibiendo el uso de celulares durante las clases y los recreos en los niveles educativos primarios.