Este martes declaran dos profesionales de la Clínica Olivos que se opusieron a la internación domiciliaria de Diego Maradona. Ambos habían advertido que el astro debía seguir bajo atención hospitalaria.

Dos médicos que se opusieron a que Diego Maradona fuera trasladado a su casa tras su operación declararán este martes en el juicio por su muerte. Se trata de Diego Dimitroff, director de la Clínica Olivos, y Fernando Villarejo, jefe de Terapia Intensiva, quienes consideraban que el exfutbolista debía continuar internado en un centro médico.

Maradona fue dado de alta el 11 de noviembre de 2020, tras ser operado de un hematoma subdural. En lugar de seguir con su recuperación en un sanatorio, fue derivado a una casa del barrio cerrado San Andrés, en Benavídez. Allí murió el 25 de noviembre, apenas dos semanas después de haber dejado el hospital.

Según fuentes judiciales, las declaraciones de los médicos serán de carácter técnico, pero apuntarán directamente a su postura contraria al traslado domiciliario. Ambos habían sugerido que la salud del paciente requería un entorno médico más controlado.

El juicio se lleva a cabo en el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro. Hay siete profesionales imputados, entre ellos el neurocirujano Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov. Todos enfrentan cargos por homicidio simple con dolo eventual, un delito que contempla penas de hasta 25 años de prisión.

Además, la enfermera Dahiana Gisela Madrid será juzgada en un proceso aparte por jurados populares en la segunda mitad del año. La Justicia busca determinar si hubo negligencia en los cuidados médicos que recibió Maradona o si su muerte fue consecuencia natural.