Los mercados financieros argentinos muestran inestabilidad tras la reciente liberación del mercado cambiario.

El presidente Javier Milei ha reafirmado que el Banco Central no intervendrá en la compra de dólares hasta que la divisa alcance el límite inferior de una banda de flotación entre 1.000 y 1.400 pesos por dólar.

Además, se anunció que la reducción temporal de las retenciones a las exportaciones agrícolas concluirá el 30 de junio, buscando acelerar la liquidación de divisas del sector. También se flexibilizó el acceso al mercado cambiario para inversores extranjeros con el fin de atraer divisas.

El peso interbancario mostró una leve apreciación, mientras que en el mercado informal se mantuvo estable. El índice bursátil S&P Merval y los bonos locales sufrieron caídas tras tres semanas de mejoras. Asimismo, el secretario del Tesoro de EE. UU. insinuó una posible línea de crédito para Argentina si fuera necesario.